martes, noviembre 15, 2005
Son tus labios melifluos
Veneno añejo de tu sabiduría.
Carpas fuera de ríos.
Son solo carpas. No destinos
Cenizas de tripas desencajadas
Fuera de un contexto ficticio y virtual.
De un poema roto de medianoche
A la luna de mediodía.
Y listos y retorcidos pasean tus sesos
De la mano de malos humos negros
Pendientes de aquellos, los que huyen.
Agonías en un par de zapatos rotos
Con vapores del fuego de un quinqué ya dormido
De relevancias parasitarias.
Y unos cuantos pelos juntos
Crin de mi apología
Nudo de gardenias de tiestos separados
Y de ti, estos muros preparados
Veneno añejo de tu sabiduría.
Carpas fuera de ríos.
Son solo carpas. No destinos
Cenizas de tripas desencajadas
Fuera de un contexto ficticio y virtual.
De un poema roto de medianoche
A la luna de mediodía.
Y listos y retorcidos pasean tus sesos
De la mano de malos humos negros
Pendientes de aquellos, los que huyen.
Agonías en un par de zapatos rotos
Con vapores del fuego de un quinqué ya dormido
De relevancias parasitarias.
Y unos cuantos pelos juntos
Crin de mi apología
Nudo de gardenias de tiestos separados
Y de ti, estos muros preparados